Latindadd

Pronunciamientos

¡América Latina primero!

Es evidente que la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos tiene implicaciones directas sobre América Latina, no sólo en materia migratoria como ya lo estamos viendo, sino también en aspectos como el económico.

La lógica neoliberal que se ha implementado en buena parte de la región ha provocado que nuestras relaciones económicas estén ligadas en gran medida a la economía estadounidense. Por ejemplo, el grueso de las exportaciones latinoamericanas va a dicho mercado. No por casualidad, sino porque tenemos un sector exportador vinculado a empresas transnacionales de ese país.

Una potencial salida de las transnacionales estadounidenses o reducción de la expansión de las mismas en nuestra región puede ser realidad en el corto plazo si se aplican los incentivos de parte del gobierno de Donald Trump. Desde la Red Latinoamericana sobre Deuda, Desarrollo y Derechos (LATINDADD), vemos esto como una oportunidad para fortalecer la integración y la cooperación económica en la región.

América Latina tiene la obligación de acentuar su mirada hacia sí misma, y eso debe ser entendido por las élites del poder económico en la región. Es la hora de fortalecer el mercado interno regional, de apostar por ampliar el mercado latinoamericano, fortaleciendo espacios como el Mercosur y CELAC, que deben jugar un rol fundamental en este proceso.

Para ello es indispensable abandonar la lógica del libre comercio que privilegia la competitividad, y reemplazarla por la lógica de de complementariedad económica. Un neo cepalismo, con todas las lecciones aprendidas que nos han dejado años de lucha fratricida por la inversión extranjera directa.

Es también la hora de fortalecer los espacios de integración regional que hemos ido construyendo como vehículos que permitan potenciar la acción conjunta frente a la arremetida racista, xenófoba y discriminatoria de Trump. Unasur y Celac tienen una principal importancia en tal sentido. De igual modo, la Presidencia Pro Témpore del Ecuador del G77 es una gran oportunidad que no podemos desaprovechar

Es la hora de fortalecer la cooperación tributaria y fiscal, eliminando esa “carrera a la baja” que el neoliberalismo ha estimulado por medio de los privilegios fiscales a la inversión extranjera. Hay que enfrentar conjuntamente las guaridas fiscales que facilitan la evasión y la elusión tributaria que tanto saquean a nuestros países.

Es la hora de una nueva arquitectura financiera regional, que nos posibilite aprovechar nuestras reservas monetarias internacionales en función del desarrollo de nuestros pueblos y no de la especulación del capital transnacional. Fortalecer la acción del Banco del Sur es fundamental en este momento.

Es la hora del combate frontal contra la corrupción estimulada por las élites económicas nacionales y el capital transnacional, que corrompen estructuras políticas con el fin de poner a su servicio a nuestros Estados nacionales. Se debe ir hasta las últimas consecuencias a fin de desentrañar el entramado de corrupción creado por Oberdrecht en toda América Latina, así como acabar con la captura de los Estados, las puertas giratorias y los lobbies empresariales.

Es la hora de forjar una amplia alianza del movimiento social latinoamericano y de las fuerzas políticas progresistas y de izquierda en América Latina, para repotenciar una propuesta económica, financiera, social, cultural y ambiental que privilegie a las grandes mayorías excluidas en nuestro continente, frente a la contraofensiva racista, xenófoba, homofóbica y excluyente que crece no sólo en Estados Unidos, sino también en Europa.

Nuestra América, marzo de 2017

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *


El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página.